El proceso académico es más fácil si aportamos todos los actores implicados la cuota correspondiente (institución educativa, educando y padres desde casa). Es sabido que si queremos resultados completos y de calidad se deben tener medidas e incorporarse en el asunto académico de nuestros hijos, pues ya que en cuestión de educación nada es al azar… El aporte es balanceado y hace mucho tiempo se descartó que la labor se delega a la academia únicamente; independientemente de la edad y el nivel académico en el que se vaya avanzando, los padres deben realizar de manera ininterrumpida un acompañamiento desde casa, aunque este varíe y se ajuste en la medida del desarrollo del proceso (de Básica a Educación Superior), pero nunca se deja de dar.
Acompañamiento escolar desde casa: es todo proceso intencionado y dirigido en donde los padres “buscan desarrollar o tienen el conocimiento, apoyan y participan activamente de toda la gestión educativa que impacta la vida de sus hijos dentro y fuera del ambiente escolar. Incluye compromiso, colaboración, solidaridad con todo el sistema escolar”, pero sí que es lastimoso cuando se observa a los padres alterados una vez reciben el informe (boletín) sobre todo en los primeros niveles académicos y se les escuchan expresiones como “por qué esto, si se te ha dado todo; sigues siendo el peor estudiante, hasta cuándo bajas notas, entre otras, se hacen evidentes casi de inmediato, pero acaso no se autoevaluara y analizara el aporte realizado pues en el resultado recibido también tiene su cuota, y quienes realizan la reflexión parece ser que injustificadamente delegan a quehaceres el no tan eficiente acompañamiento que de igual manera no cambia ni alega el resultado del bajo nivel por el que atraviesa el estudiante.
Ahora bien, nunca es tarde para realizar el aporte esperado por parte de los padres, por acá algunas recomendaciones generales, sencillas y prácticas para realizar el acompañamiento escolar desde casa y saldar lo que jamás se debió descuidar: 1. Establecer un horario para estudiar y que en la medida de lo posible este no se esté modificando. 2. Ubicar un lugar para que los chicos estudien con las condiciones de luz y temperatura adecuada. 3. Realicemos padres e hijos la revisión de compromisos juntos. 4. Padres, a supervisar el proceso académico asistiendo periódicamente a la escuela. 5. Aportar suficiente motivación valorando todo el esfuerzo que realizan los chicos pero también exigiéndole para que avancen de manera decidida.
Padres, no hay excusas para no realizar acciones reales, aterrizadas y concretas que permitan la mejora del acto educativo de los estudiantes desde casa, o reforzar y fortalecer la labor ya hecha, recuerde: predique con el buen ejemplo, si desea hijos lectores, anímese usted a leer con ellos; si desea buenos académicos, anímese a apoyar el proceso junto a sus hijos.
Autor. Luis Eduardo Narváez Martínez
Información: @LuisENarvaezM
Corrector de estilo gramatical: Nury Ruiz Bárcenas (Presidenta-Fundadora Fundación De Escritores Meira Delmar).